Cuando las hojas se tornan pálidas y toman un tono amarillento o la planta no se desarrolla bien, frecuentemente se debe a la carencia de nutrientes, el sulfato resuelve de forma rápida y efectiva este problema, y además de hierro proporciona magnesio, azufre y micronutrientes indispensables para un excelente desarrollo, por lo que actúa también como un eficaz corrector de carencias como fertilizante.
Otro beneficio importante es que el sulfato de hierro Crece más ataca la aparición de musgo y líquenes en tronco o tallos y por contacto combate caracoles, babosas, larvas, gusanos y otros insectos nocivos para las plantas.
Es recomendado especialmente para cítricos, frutales, hortensias, azaleas, jazmines y plantas en macetas.